domingo, 24 de mayo de 2015

VOLANDO TRAS EL TIEMPO PERDIDO


Seis meses. Quizás un poco más. Ni los mejores ni los peores de mi vida, pero 6 meses al fin y al cabo. Algo más de ciento ochenta días con sus correspondientes horas, minutos y segundos... Y aquí estoy otra vez.

En realidad nunca me he ido. Simplemente estaba asimilando, intentando asumir cosas incomprensibles que sigo sin entender y aceptando definitivamente que vivimos en un inestable caos en transformación continua.

En este tiempo podría haber escrito hasta la saciedad sobre el fin de la vida, sobre la agonía y el duelo, sobre lo que cuesta morir a algunas personas y lo rápido que se van otras. Sobre el dolor que siempre se queda, sean cuales sean las condiciones que rodean al fin de una vida... Pero llegué a la conclusión de que todas mis cavilaciones eran estériles y que no diferirían mucho de lo que cualquier otra persona pueda pensar al respecto.

He intentado generar un botón de OFF en mi cabeza cuando empiezo a dar más vueltas de las necesarias y estoy casi a punto de dominarlo... En realidad no es así, pero me encantaría ;)

Con este post simplemente quería decir que estoy aquí. Que sigo aquí. Que continúo buscando algo bonito que contar, algo positivo que transmitir... Que sigo volando tras cada minuto que se me escapa sin darme cuenta... Y que espero retomar todo esto con ilusión, aunque este post no significa necesariamente un retorno.