jueves, 23 de junio de 2011

INTERNET COMO PRÓTESIS

Leo mucho a Millás (bueno, leía), probablemente por eso, he concluido hace tiempo que internet es una prótesis para mí... He intentado muchas veces imaginar mi vida sin este sistema de comunicación virtual y me cuesta. Entre otras cosas porque llevo como15 años atrapada en la red en mayor o menor medida.

Internet fue para mí inicialmente una herramienta para comunicarme con desconocidos. Conocí gente de otros países en chats y me comunicaba con ellos por mail (cuando la gente se molestaba en escribir y contestar mails). Luego empecé a utilizarlo para conocer gente más cercana y, más adelante, para mantener el contacto con mi gente por el messenger, lo cual  me llevaba mucho tiempo, pues necesitaba estar al menos un par de horas al día manteniendo 9 ó 10 conversaciones simultáneas (Ahí vi con claridad lo útiles que me habían resultado las clases de mecanografía caseras impartidas por mamá con la máquina de escribir manual). Por aquel entonces mi mundo residía en mis libretas, pero aún así mis compañeros de la facultad me veían como una marciana, una "yonki de internet" simplemente porque iba en algún descanso entre clases a mirar el correo... Un día llegaron los blogs a mi vida y compartí lo que se puede compartir, aunque sigo guardándome parcelitas anónimas bajo contraseña en otros blogs... y hasta ahí fui "pionera", cuando le decía a alguien tengo un blog... y me contestaban ¿Qué es eso?...

Ahora soy un ciber-dinosaurio. No me gusta facebook aunque tengo cuenta y la uso (según para qué). No me gusta publicar mis fotos (aunque soy consciente de que mi imagen vaga por google sin demasiado esfuerzo) y me he hecho bastante celosa de mis imágenes y de las de los míos. No me gusta twitter, aunque alguien me abrió una cuenta para reforzar un blog y he aprendido a manejarlo, aunque no me atrae en absoluto y, de hecho ni lo entiendo... y tampoco entiendo la moda estúpida de los videoblogs (discúlpenme sus usuarios, pero no veo la necesidad de enseñar tu careto para decir lo que piensas)...

Así que aquí estoy... no soy mayor pero empiezo a sentirme rara. Estoy cómoda en este medio bloguero pero el resto de la red (especialmente lo nuevo) se me antoja un territorio amenazante e inexplorado en el que no me apetece lo más mínimo adentrarme...

...Y aquí estoy. No percibo el mundo sin internet ni internet sin mis blogs, por eso cuando hace algunas semanas hubo un fallo global en blogger justo un par de días que tenía tiempo de escribir, me sentí fatal... ya no sé si es costumbre, adicción o necesidad... el caso es que un ordenador sin internet es un jardín sin flores... pero internet sin mis blogs se me haría realmente muy duro. Sin duda mis blogs son parte de mí del mismo modo que lo es mi casa...

1 comentario:

cocodras dijo...

¡Uf, Ana! Cómo hemos cambiado. Y digo hemos porque me he sentido muy identificada con este post. Por esas fechas me hice una cuenta de twitter y la cerré porque no me llamaba nada y míranos ahora :D